Gran Premio de Italia de 1962, Autódromo de Monza
Dónde: Gran Premio de Italia de 1962, Autódromo de Monza.
Cuando: 16 de Septiembre de 1962.
Quien: Ricardo Rodriguez a bordo de la Ferrari 156 “sharknose”.
Una escasa imagen del talentoso y precoz piloto mexicano Ricardo Rodriguez a bordo de la recordada “sharknose” o nariz de tiburón, auto con el que Ferrari logró el campeonato mundial de marcas y de pilotos en la temporada anterior.
A pesar de eso y como una muestra de que en la Fórmula 1 los avances no son sólo cosa del presente, este lindo auto se vio sobrepasado en 1962 por sus competidores ingleses y por tanto los resultados fueron decepcionantes. En efecto, tan decepcionantes que el Commendatore Ferrari ordenó hacer pedazos todas las sharknose tras este GP Italiano, última fecha puntuable que la scuderia tomó parte a pesar que aún quedaban dos GP por disputarse en Estados Unidos y Sudáfrica con entremedio una fecha no puntuable en Ciudad de México, primera oportunidad en que la categoría visitaría suelo azteca.
Ricardo Rodriguez piloto oficial de Ferrari en 1962 acumulaba una experiencia impresionante como piloto considerando sus cortos 20 años de edad. En efecto, en su currículum figuraba un tempranísimo debut en las competiciones de automovilismo en México con sólo 13 años a bordo de un Fiat 500, un debut internacional (con triunfo correspondiente) en la pista californiana de Riverside a los 15 años a bordo nada menos que de un Porsche 550 RS, un “cuasi” debut a los 16 años en las 24 horas de Le Mans ( a última hora fue rechazado por la dirección de la prueba por ser demasiado joven), varias participaciones internacionales en Sebring, Daytona, Targa Florio y los 1000 kilómetros de Nurburgring entre los 16 y los 18 años de edad. A los diecinueve años un segundo lugar en los 1000 kilómetros de Nurburgring junto a su hermano mayor Pedro a bordo de una Ferrari Testarosa y también un triunfo, siempre junto a su hermano, en los 1000 kilómetros de Montlhery a bordo de una Ferrari 250 GT SWB. Finalmente en Septiembre de 1961 debutó en una carrera puntuable por el campeonato mundial de F1 con ocasión del GP de Italia a bordo de un auto similar al que aparece en esta fotografía, donde clasificó nada menos que en el segundo lugar de partida, abandonando lamentablemente por una falla de motor.
Enzo Ferrari consideró estos buenos resultados para ofrecerle un puesto de titular en la escuadra de F1 durante 1962, donde además condujo los autos Sport y de Gran Turismo de la marca logrando ganar la famosa carrera Targa Florio que se disputaba por las estrechas rutas cercanas a Palermo y que en ese entonces era válida por el campeonato mundial en la categoría Sport.
Dada la decisión de Ferrari de renunciar a disputar las últimas carreras de F1 de 1962, Rodriguez buscó una alternativa para participar y especialmente en la que se correría en su tierra natal, cerrando un trato con Rob Walker para conducir un Lotus 24, habiendo en forma previa obtenido la autorización de Ferrari quien además lo alentó a continuar como piloto titular para la temporada siguiente asegurándole que dispondría de autos completamente nuevos (se refería a los nuevos 156 y 158, primeros modelos diseñados por Mauro Forghieri).
Tras adjudicarse, en pareja con su hermano Pedro, los 1000 kilómetros de Paris disputados en el circuito de Montlhery por segunda vez consecutiva, en esta oportunidad a bordo de una Ferrari 250 GTO dispuesta por el importador norteamericano de la marca, Ricardo y su hermano volvieron a su ciudad natal a preparar la participación de la carrera de Fórmula 1 que se disputaría en el autódromo Magdalena Mixiuhca de la capital mexicana.
Lamentablemente durante el primer día que se abrió el circuito para iniciar las pruebas, un Jueves 1° de Noviembre, Ricardo se estrelló contra los guard rails exteriores de la curva peraltada (la misma en que Senna se volcó en las clasificaciones del GP de 1991), falleciendo en forma prácticamente instantánea. Si bien se especuló bastante sobre las causas del accidente, hasta la fecha no hay consenso, siendo lo más probable la rotura de la suspensión trasera derecha lo que la gente de Lotos y del team de Walker siempre negaron responsabilizando del accidente a Rodriguez por un exceso de ímpetu en su afán por mantener el mejor registro del día que le habían arrebatado minutos antes. Hoy en día, de estar vivo, Ricardo Rodriguez tendría setenta años de edad.
En la capital azteca los socios, entre los que me cuento, y amigos de la sociedad de honor Scudería Hermanos Rodriguez AC se darán cita este Jueves 1° de Noviembre en el autódromo, hoy intitulado a los recordados hermanos, para recordar esta fecha en el lugar preciso de la tragedia.