63 años del Club de Automovilismo Deportivo de Quilpué
En muy pocos lugares de Chile, el automovilismo se ha arraigado tanto como en la Ciudad de Quilpué, por más de 60 años, la actividad se volvió tradición de cada fin de semana como en ningún otro lugar ha sucedido, por tan largo tiempo.
La responsabilidad de esta costumbre, la tiene el Club de Automovilismo Deportivo de Quilpué, institución que por estos días cumple 63 años de vida. Fundado en 1957 bajo el nombre de “club de Volantes de Quilpué” por Luis Silva Torres, se transformó en el Club responsable de uno de los autódromos más icónicos de Chile.
El autódromo de Villa Olímpica, nació gracias a las gestiones de este Club junto a la Municipalidad y a las donaciones de terrenos privados, nació un trazado de tierra que vio sus primeras competencias. Hoy, modernizado pero de alguna manera inmune al paso del tiempo, el Autódromo de Villa Olímpica se posiciona como una rareza en el paisaje. Sumergido en una zona completamente urbana, ha sido acogido como un ícono y una parte de los corazones de los cuidadanos de Quilpué, un caso único en tiempos donde el automovilismo ha sido desplazado por la comodidad de las personas.
La comunidad repleta el autódromo como en ningún otro lugar de Chile cada vez que hay competencias, gracias a la labor constante y apasionada del CAD Quilpué. Desde los Fórmula 3, pasando por los Fiat 600 y 125, hasta modernos autos de Turismo 2000 y los tradicionales Turismo 4000, componen el gran currículum organizacional de este club.
Desde los años 80, donde su actividad comenzó a crecer en mayor proporción, hasta el día de hoy, cuando se reúnen más de 100 autos en cada competencia, el CAD Quilpué ha sabido marcar en los corazones de los quilpueinos, la importancia de las competencias de automovilismo, celebrando hoy honorables 63 años de existencia, lo que es, sin lugar a dudas, un logro único.